Perder lombrices es una de las cosas que más debemos evitar, por lo que terminaré con los últimos 5, aunque no los puedo poner en último lugar.
No cosechar el humus
Las lombrices consumen la materia orgánica en descomposición para generar humus. Este mismo se puede obtener dejando que las bacterias de encarguen de "compostearlo". En cualquiera de los dos casos, el material que ya está compostado YA ESTA DEGRADADO. Esto significa que no tiene utilidad para la lombriz. Siguiendo el ciclo natural de la lombriz, al estar viviendo prácticamente en humus, considera que ya no hay comida disponible y afecta tanto su alimentación como su reproducción.
Alimento envenenado!!!
Suena un poco surrealista, pero es más común de lo que parece. En primera, hay que recordar que el agua puede ser tóxica para las baterias cuando está tratada con cloro y esto puede afectar muy negativamente a la lombriz. Las frutas y verduras con algún desinfectante ocasionan el mismo efecto en la cuna. Por último, si estás utilizando estiércol, recuerda que los desparasitantes son venenos para lombrices... incluyendo las de tu cuna. El uso de desparasitantes en la ganadería es muy común, así que hay que tener cuidado de no utilizar estirércol después de que se ha desparasitado el ganado.
Lluvias torrenciales
Al igual que el viento, la lluvia puede causar graves daños en nuestras cunas si estas no están a resguardo. No solo pueden inundar las cunas y ahogar a nuestras lombrices; también pueden arrastrar o deshacer el material del lombricario, matar lombrices pequeñas y evitar que el ambiente sea el correcto para obtener el máximo rendimiento.
Cambios abruptos en la alimentación
Aquí hay muchas opiniones, pero yo apoyo la premisa de que cambios abruptos en la alimentación puede llegar a afectar mucho a las lombrices, causando incluso su muerte. No creo que sea porque saben feo o porque no sirven; como he mencionado muchas veces, la lombriz puede consumir cualquier cosa que haya estado viva. El problema es que, con cambios fuertes en la alimentación, se pueden generar cambios también fuertes en el ambiente, lo cuál puede ser desastroso. Por ejemplo, cambiar de puro estiércol a sobras de cocina puede cambiar mucho el ambiente en el que la lombriz vive, generando estrés que puede resultar muy dañino. El problema en este caso, es no prestar atención y esperar que un cambio tan fuerte en el ambiente de la lombriz no tenga repercusiones.
MALA ADMINISTRACIÓN
Este va con mayúsculas, ya que incluye todos y cada uno de los anteriores, aunque va aparte porque puede ocasionar muchos más. Cuando se inicia una instalación de lombricultura, es necesario planear todas las variables posibles y prepararse para ellas. En una instalación casera, estas son muy pocas, pero no por eso debemos esperar que las lombrices se cuiden a sí mismas. Estas crecen en un sistema artificial que debemos mantener estable y de lo que hagamos depende el éxito de nuestro lombricario. Afortunadamente, con un sistema casera no es mucho problema, pero es el primer paso para poder intentar ondas más gruesas.
Aunque existen muchas otras razones, la gran mayoría caen dentro de algunas de estas. De todos modos no hay porqué asustarse; todas pueden controlarse tranquilamente con un poco de planeación e imaginación.
Comienza a cuidar de estas 14 y deja de perder lombrices. Como sea, salen medio caras como para que se nos mueran solo porque sí.
Saludos
Información, trucos y anécdotas para crear una instalación de lombricultura a nivel casero o pequeño emprendimiento.
domingo, 14 de septiembre de 2008
miércoles, 10 de septiembre de 2008
14 Causas de Pérdida de Lombrices II
Siguiendo con las causas de que perdamos lombrices en nuestra instalación de lombricultura:
pH ácido
Una situación que se presenta continuamente en nuestras cunas de lombricultura. La lombriz no puede consumir NADA que no esté degradado. Contrario a lo que algunos piensan, la lombriz no tiene dientes, ácidos estomacales ni nada por el estilo; depende por completo de la degradación natural que llevan a cabo las bacterias del suelo. Por eso, cuando nosotros metemos comida sobrante, esta para por un periodo de degradación antes de poder ser consumida. Por supuesto que las lombrices no se esperan a que esté todo listo; van comiendose lo que se degrada. Si ponemos una cáscara de plátano, la veremos llena de lombrices después de unas cuantas horas, consumiendo las partes blandas y dejando que la cubierta dura de la cáscara se vaya degradando. Es por esto que si llenamos con cosas ácidas nuestra cuna, el pH irá descendiendo hasta niveles peligrosos para nuestras lombrices, evitando que se alimenten (cuando se pueden alejar) o matándolas (cuando no pueden). Esta variable debemos de cuidarla muy bien.
Viento
Aunque no es precisamente muy común, el viento puede hacer estragos bastante serios en nuestra cuna de lombrices. La lombriz es casi pura agua. Se desplaza humedeciendo su camino y requiere de humedad para alimentarse. El viento, sobre todo cuando es fuerte, puede "secar" una lombriz en unos cuantos minutos, por lo que nuestras cunas de lombricultura deben estar cubiertas o a resguardo. Aunque la lombriz se protege "enterrándose", el material de nuestra cuna se seca, impidiendo que la lombriz se alimente y retrasando mucho la degradación bacteriana, que requiere humedad para llevarse a cabo.
Alimentar de más
Aquí, aparte de presentarse una situación con el pH, el tener comida de más pudriéndose en nuestra cuna genera alcoholes, exceso de calor y atrae insectos y animales indeseables. Es por esto que debemos cuidar la cantidad que alimentamos a nuestra cuna de lombrices. No es difícil, solo hay que ver a que ritmo se alimentan las lombrices y darles de acuerdo a este. Si tienes sobrantes al principio no te preocupes; no pasará mucho antes de que te falte que darles de comer.
Predadores
Aunque algunos, como los ratones, son atraidos por la comida, hay muchos otros que se alimentarían gustosos de nuestras lombrices. Toda instalación de lombricultura debe tomar en cuanta que las aves, topos y otros insectos pueden hacer una vida idílica en nuestra cuna de lombrices, por lo que hay que estar atentos. Afortunadamente, en una instalación casera, rara vez vamos a tener que lidiar con topos, pero los pájaros, las hormigas y los ratones pueden ser un problema. Nuestra cuna de lombrices debe estar cubierta y a resguardo de estos predadores, lo cuál no es muy complicado una vez que agarramos la "maña" de esta actividad.
Falta de Oxígeno
Otra causa muy común. Si nunca movemos el material de nuestra cuna, este tiende a compactarse, cerrando la entrada de aire. Las bacterias que pueden degradar la comida y hacerla últil para la lombriz requieren aire y, en ausencia de este, mueren. Al morir estas bacterias, otras se dedican a seguir con su trabajo. Estas son anaeróbicas y, aparte de generar malos olores (el famoso olor a "caño"), también aumentan la acidez. Para evitar esto, debemos "revolver" el material de nuestra cuna (al menos una vez por semana). Muchos autores están en contra de esto por el estrés que le causa a las lombrices, pero la verdad es que hay más estrés y continuo en una cuna inadecuada que por una sacudida de vez en cuando.
En la siguiente entrada pondré los últimos 5.
Un saludo
pH ácido
Una situación que se presenta continuamente en nuestras cunas de lombricultura. La lombriz no puede consumir NADA que no esté degradado. Contrario a lo que algunos piensan, la lombriz no tiene dientes, ácidos estomacales ni nada por el estilo; depende por completo de la degradación natural que llevan a cabo las bacterias del suelo. Por eso, cuando nosotros metemos comida sobrante, esta para por un periodo de degradación antes de poder ser consumida. Por supuesto que las lombrices no se esperan a que esté todo listo; van comiendose lo que se degrada. Si ponemos una cáscara de plátano, la veremos llena de lombrices después de unas cuantas horas, consumiendo las partes blandas y dejando que la cubierta dura de la cáscara se vaya degradando. Es por esto que si llenamos con cosas ácidas nuestra cuna, el pH irá descendiendo hasta niveles peligrosos para nuestras lombrices, evitando que se alimenten (cuando se pueden alejar) o matándolas (cuando no pueden). Esta variable debemos de cuidarla muy bien.
Viento
Aunque no es precisamente muy común, el viento puede hacer estragos bastante serios en nuestra cuna de lombrices. La lombriz es casi pura agua. Se desplaza humedeciendo su camino y requiere de humedad para alimentarse. El viento, sobre todo cuando es fuerte, puede "secar" una lombriz en unos cuantos minutos, por lo que nuestras cunas de lombricultura deben estar cubiertas o a resguardo. Aunque la lombriz se protege "enterrándose", el material de nuestra cuna se seca, impidiendo que la lombriz se alimente y retrasando mucho la degradación bacteriana, que requiere humedad para llevarse a cabo.
Alimentar de más
Aquí, aparte de presentarse una situación con el pH, el tener comida de más pudriéndose en nuestra cuna genera alcoholes, exceso de calor y atrae insectos y animales indeseables. Es por esto que debemos cuidar la cantidad que alimentamos a nuestra cuna de lombrices. No es difícil, solo hay que ver a que ritmo se alimentan las lombrices y darles de acuerdo a este. Si tienes sobrantes al principio no te preocupes; no pasará mucho antes de que te falte que darles de comer.
Predadores
Aunque algunos, como los ratones, son atraidos por la comida, hay muchos otros que se alimentarían gustosos de nuestras lombrices. Toda instalación de lombricultura debe tomar en cuanta que las aves, topos y otros insectos pueden hacer una vida idílica en nuestra cuna de lombrices, por lo que hay que estar atentos. Afortunadamente, en una instalación casera, rara vez vamos a tener que lidiar con topos, pero los pájaros, las hormigas y los ratones pueden ser un problema. Nuestra cuna de lombrices debe estar cubierta y a resguardo de estos predadores, lo cuál no es muy complicado una vez que agarramos la "maña" de esta actividad.
Falta de Oxígeno
Otra causa muy común. Si nunca movemos el material de nuestra cuna, este tiende a compactarse, cerrando la entrada de aire. Las bacterias que pueden degradar la comida y hacerla últil para la lombriz requieren aire y, en ausencia de este, mueren. Al morir estas bacterias, otras se dedican a seguir con su trabajo. Estas son anaeróbicas y, aparte de generar malos olores (el famoso olor a "caño"), también aumentan la acidez. Para evitar esto, debemos "revolver" el material de nuestra cuna (al menos una vez por semana). Muchos autores están en contra de esto por el estrés que le causa a las lombrices, pero la verdad es que hay más estrés y continuo en una cuna inadecuada que por una sacudida de vez en cuando.
En la siguiente entrada pondré los últimos 5.
Un saludo
domingo, 7 de septiembre de 2008
14 Causas de Pérdida de Lombrices
Nuestas lombrices no son solo gusanitos. Hay que tratarlas como nuestro "ganado", que estará creciendo y transformando basura en nuestro lombricario. He visto muchos que fracasan con la lombricultura por el simple hecho de no tomarla lo suficientemente en serio. Si quieres reciclar tus desechos y ayudar un poco a tu planeta para que aguante más, hay que considerar varias cosas simples que tendrán a nuestras lombrices sanas y desarrollandose.
Agua: Cantidad y Calidad
El agua presenta dos problemas: si es en exceso, las lombrices pueden ahogarse, ya que respiran por la piel. Si no hay suficiente, las lombrices no pueden alimentarse y, por lo tanto, mueren. El agua debe manejarse para evitar que las lombrices se vean afectadas y que puedan desarrollarse al máximo. Otro punto es que el agua “de ciudad” lleva cloro o algún otro medio desinfectante que destruye las bacterias que degradan la materia orgánica (que son la base de la lombricultura), reduciendo la alimentación de las lombrices.
Exposición a la luz
Las lombrices, especialmente las recién nacidas, son exageradamente sensibles al sol. Por ningún motivo las expongas a la luz directa del sol de medio día, ya que matarás a las pequeñas y les administrarás una fuerte dosis de estrés a las demás. Para hacer movimientos con las cunas, lo mejor es levantarse temprano o esperar el atardecer. Si vas a utilizar luces, no es necesario ponerlas directamente sobre la cuna. Afortunadamente, existen muchas formas de terminar las actividades que requiere nuestra cuna de lombrices sin utilizar el sol. Aunque muchos autores de lombricultura defienden el uso de la luz solar para cosechar humus y capturar lombrices, hay mejores formas de hacerlo.
Altas temperaturas
Cuando metemos material nuevo, comienza un proceso de degradación, que se llama normalmente “composta”. Entre otras cosas, este proceso genera calor, al punto de poder cocinar las lombrices. Quienes estén familiarizados con el curado del heno, paja y esas ondas, sabrá que, cuando no se hace correctamente, puede haber hasta incendios, debido a las altas temperaturas que se generan con la composta. Aunque suena muy alarmista, la realidad es que es raro llegar a este punto. Normalmente se generará mucho calor, pero las lombrices podrán moverse mientras se enfría o lo regaremos para regular la temperatura. Esta es otra razón por la que el manejo del agua es tan importante.
Bajas temperaturas
Bajemos al otro extremo. Cuando el frío se pone pesado, las lombrices tienden a aletargarse, dejan de alimentarse y, si se ponen las cosas muy feas, mueren. Si estás en un clima tropical o tienes tu lombricario dentro de tu casa, difícilmente vas a tener problemas; sin embargo, si estás en un lugar como yo, donde bajamos hasta 4 grados o menos, hay que tomar algunas medidas. Estas son el uso de material nuevo para que se ponga a compostarse y genere calor. Las lombrices se concentrarán en las áreas con calor y no se perderán tantas. La otra es utilizar algún medio de calentar las cunas, aunque este dependerá de la región en donde nos encontremos.
Por esta entrada le dejaré ahi. Espera los siguientes puntos que tienes que cuidar, pero ve preparandote para estos. La gran mayoría de las variables de la lombricultura se pueden manejar muy fácilmente con un poco de planeación.
Saludos
RARG
Agua: Cantidad y Calidad
El agua presenta dos problemas: si es en exceso, las lombrices pueden ahogarse, ya que respiran por la piel. Si no hay suficiente, las lombrices no pueden alimentarse y, por lo tanto, mueren. El agua debe manejarse para evitar que las lombrices se vean afectadas y que puedan desarrollarse al máximo. Otro punto es que el agua “de ciudad” lleva cloro o algún otro medio desinfectante que destruye las bacterias que degradan la materia orgánica (que son la base de la lombricultura), reduciendo la alimentación de las lombrices.
Exposición a la luz
Las lombrices, especialmente las recién nacidas, son exageradamente sensibles al sol. Por ningún motivo las expongas a la luz directa del sol de medio día, ya que matarás a las pequeñas y les administrarás una fuerte dosis de estrés a las demás. Para hacer movimientos con las cunas, lo mejor es levantarse temprano o esperar el atardecer. Si vas a utilizar luces, no es necesario ponerlas directamente sobre la cuna. Afortunadamente, existen muchas formas de terminar las actividades que requiere nuestra cuna de lombrices sin utilizar el sol. Aunque muchos autores de lombricultura defienden el uso de la luz solar para cosechar humus y capturar lombrices, hay mejores formas de hacerlo.
Altas temperaturas
Cuando metemos material nuevo, comienza un proceso de degradación, que se llama normalmente “composta”. Entre otras cosas, este proceso genera calor, al punto de poder cocinar las lombrices. Quienes estén familiarizados con el curado del heno, paja y esas ondas, sabrá que, cuando no se hace correctamente, puede haber hasta incendios, debido a las altas temperaturas que se generan con la composta. Aunque suena muy alarmista, la realidad es que es raro llegar a este punto. Normalmente se generará mucho calor, pero las lombrices podrán moverse mientras se enfría o lo regaremos para regular la temperatura. Esta es otra razón por la que el manejo del agua es tan importante.
Bajas temperaturas
Bajemos al otro extremo. Cuando el frío se pone pesado, las lombrices tienden a aletargarse, dejan de alimentarse y, si se ponen las cosas muy feas, mueren. Si estás en un clima tropical o tienes tu lombricario dentro de tu casa, difícilmente vas a tener problemas; sin embargo, si estás en un lugar como yo, donde bajamos hasta 4 grados o menos, hay que tomar algunas medidas. Estas son el uso de material nuevo para que se ponga a compostarse y genere calor. Las lombrices se concentrarán en las áreas con calor y no se perderán tantas. La otra es utilizar algún medio de calentar las cunas, aunque este dependerá de la región en donde nos encontremos.
Por esta entrada le dejaré ahi. Espera los siguientes puntos que tienes que cuidar, pero ve preparandote para estos. La gran mayoría de las variables de la lombricultura se pueden manejar muy fácilmente con un poco de planeación.
Saludos
RARG
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